«Los chicos son idiotas. Algunos son idiotas todo el tiempo. Todos lo son en algún momento. Así son los chicos. Bueno, quizás no todos. En su mayoría los chicos son idiotas, pero las chicas pueden ser malvadas».
5
Es el baile de invierno. Clay lleva puesto un traje oscuro en el que su corbata resalta. Se encuentra sentado en las gradas, pensativo. Ve como la genta baila. Clay no puede dejar de pensar en Hannah, en bailar con ella.
Repentinamente, aparece a su lado Jeff. Jeff es un amigo de Clay. Es moreno, alto, de pelo negro y de cuerpo atlético. Forma parte del equipo de baseball del instituto Liberty.
-Hola Jeff-. Dice Clay.
-Ve por ella-. Jeff le señala a Hannah.
-¿Para qué?-. Pregunta Clay resignado.
-Es un baile, baila con ella-.
-No sé bailar-.
-Esta noche sí, te lo prometo. Vamos, tú puedes-. Jeff se le queda mirando a Clay esperando su respuesta.
Clay se arma de valor, y saluda a Hannah desde donde está. Le hace un gesto para encontrarse en la pista de baile. Ahí la tiene, Hannah se encuentra delante suya.
-Señor-. Le dice Hannah bromeando.
-Señora-. Bailan un rato.
-¿Has recibido clases? Estoy impresionada-.
-Soy impresionante-. Contesta Clay con una sonrisa. -Quédate conmigo y verás. ¿Puedes quedarte conmigo?-. Pregunta nuestro protagonista.
-Sí puedo-.
Hannah se empieza a desangrar. Clay se mancha de sangre también. Se despierta, está sudando, ha sido una de las peores pesadillas que ha tenido en años. Aún le sigue rondando en su cabeza, además de la foto que le sacó desnudo a Tyler como venganza de lo de Hannah.
Tras unos minutos, ya se ha cambiado y se dispone a ir al instituto. Se peina un poco, desayuna rápido con sus padres, y va a toda prisa a Monets.
Se pide un americano triple. Con el café en mano, se dirige a una de las mesas que se sitúan en la parte alta de la cafetería. Desde ahí, observa que hay una persona conocida a pocos metros de él. Se trata de Courtney. La mira. Lo que ha escuchado de las cintas el día anterior está presente en su cabeza. Courtney se da cuenta de su presencia, y se despide de sus dos padres, marchándose en el acto.
Llega la hora del instituto, y en un pasillo Clay se encuentra con Tyler.
-¿¡Qué demonios!? Esa foto circula por todo el colegio-. Le espeta Tyler.
-Sí, puede pasar, ¿no?-.
-¿Qué pretendes hacer?-. Pregunta Tyler algo asustado.
-Pretendo hacer algo, lo que sea, pero más que ustedes-.
-Sí, pero soy el único que lo está pagando. Todos se ríen de mí-.
-Por ahora, eres el único… por ahora-. Le dice nuestro protagonista amenazante.
Clay avanza, y empieza a subir las escaleras para ir a clase. Sin embargo, Justin aparece sin previo aviso detrás suya.
-¡Clay Jensen!-.
-Hola Justin-.
-Hay una bonita foto que tú sacaste a Tyler-. Justin está realmente molesto.
-No tanto como la tuya de Hannah-. Responde Clay.
-Bien, sí. Pero ahora detente-.
-¿Detenerme?-.
-Esto nos compromete a todos. Si cae uno, caemos todos-.
-Quizá no me importe-. Le espeta Clay tajante.
Termina una clase, y Clay sale al pasillo. Los estudiantes abarrotan los pasillos del instituto Liberty. Aún así, es capaz de ver a Courtney. Tiene que hablar con ella. Sobre todo, después de haber escuchado su cinta.
-Hola Courtney-.
-Hola Clay, ¿qué tal?-. Courtney le sonríe algo incómoda.
-Oye, sobre lo que me hablaste el otro día. No estoy muy bien, y no sé si podríamos hablar en algún sitio-.
-Sí, claro-.
-¿Tienes auto?-. Pregunta Clay con curiosidad. -Podríamos irnos a quinta hora-. Propone.
-Claro que sí, nos vemos en el aparcamiento-.
-Gracias Courtney-. Contesta.
Nuestro protagonista ya se encuentra en el automóvil.
-Que bien que hablemos Clay. Todos hemos guardado el secreto-. Courtney está preocupada de ser delatada.
-Ya-.
-¿Lo que te preocupa es eso?-.
-Sí-. Mira por la ventana instintivamente, y se da cuenta de que Tony les está observando desde su auto. -Puedo… quiero enseñarte algo. ¿Me dejas que te lleve?-. Le muestra su móvil con una ubicación.
Al cabo de unos minutos, están en un cementerio contemplando una tumba. Es la de Hannah.
-No hay lápida-. Dice extrañada Courtney.
-Tardan cuando algo ocurre repentinamente-. Clay mira serio a su compañera.
-Esto es muy bonito-.
-¿Bonito?-. Pregunta nuestro protagonista indignado.
-¿¡Qué quieres que te diga!? ¿Por qué me has traído aquí?-.
-Porque te comportas como si el suicidio de Hannah fuera una actividad escolar. Una excusa para colgar carteles-.
-Ayudo a superarlo al colegio-. Se defiende Courtney.
-¿Y tú? Ayudas al colegio y ocultas también tu culpa-.
-No es culpa mía, fue elección de Hannah-. Clay la mira enfadado.
-Es culpa de todos los que hablaron mal de ella, y de los que le molestaron. Y tuya, porque ella creía que tú eras su amiga. ¡Y hablaste mal de ella con un idiota, solo para tapar que eres lesbiana!-. Clay empieza a perder la paciencia.
-No es cierto-.
-No lo entiendo, estamos en el siglo XXI. ¿Tan difícil es?¡Caray! Si tus padres son gays, desde preescolar-.
-Y nadie los tenía, ¿sabes lo que es eso? ¿Y si fuera lesbiana? ¿Qué crees que diría todo el mundo? «Tiene dos papás gays, por eso ella es… » Lo han pasado mal por ser gays, no podría hacerles eso-. Una lágrima cae en su mejilla.
-Lo que la gente piensa importaba menos que la vida de Hannah. Ella te necesitaba como amiga-.
-Me asusté, ¿de acuerdo? Ya lo siento, no supe qué hacer-.
-No me lo tenías que decir a mí-. Clay la fulmina con la mirada. Courtney se va a paso rápido llorando a mares.
Clay se sienta en un banco del cementerio, a su lado aparece Tony.
-Sé lo que vas a decir-. Dice Clay mirando al infinito. Tony saca una cinta de su bolsillo y se la entrega.
-Es la canción del baile. La que bailaste con Hannah-.
-Habérmela dado en el colegio-.
-Les vi bajar por la carretera del cementerio. Y no pensé verte de nuevo. Venir aquí.. no es algo que debas hacer Clay-. Mira a su amigo.
-Con respecto a Courtney…-.
-Le vi salir de aquí, parecía hecha polvo-.
-¿Sabes? Cuando escucho las cintas, quiero verle en el colegio al día siguiente. Quiero bailar con ella, y besarle. Pero no puedo. Siento que deberían pagar por eso-.
-¿Y tú? ¿Estás pagando?-. Clay se queda en silencio, saca una hoja de su mochila, escribe el nombre de Hannah, y la coloca encima de su tumba. Tony le señala su auto, tiene su bicicleta justo al lado.
Clay ya se encuentra en la carretera de vuelta a casa, las piernas le pesan, y no puede dejar de pensar en Hannah. Pero algo ocurre, un auto le detiene.
-¿¡Qué demonios!?- Dice en voz alta Clay. Alguien se baja del vehículo. Alguien alto.
-¿Damos una vuelta?-. Es Justin.
-No-. Dice rotundamente Clay. Zach se baja también.
-Creo que sí-. Zach lo agarra y lo lleva a la fuerza al vehículo. Ve al conductor: es Alex.
-¿Para qué haces esto?-. Se dirige a Alex.
Alex no contesta y empieza a acelerar.
-Sabemos lo que le has hecho a Courtney. Deja de joder a la gente Clay-. Le espeta Justin.
-Bien, pero frena el auto Alex-. Alex hace caso omiso. Justin mira a Zach con cara de preocupación.
-Creo que lo ha entendido, ¡frena!-. Grita Zach. Pero antes de que Alex lo haga por su propia voluntad, les para la policía. Clay espera que los detengan, pero algo lo deja anonadado: el policía, es padre de Alex.
-No puedes hacernos nada Clay, estamos blindados-. Le dice Justin con una sonrisa.
Clay se va a casa, y se entera de algo terrible: su madre ha sido contratada como abogada por el colegio. Va a ir en contra de los padres de Hannah. Su madre, va a tratar de demostrar que no sufría ningún tipo de acoso su antigua compañera.
Courtney
«Courtney, que nombre más bonito. Y que chica más bonita. Con su familia perfecta. Toman café juntos, cada mañana. Y eres muy simpática Courtney. Todo el mundo lo dice. Eres muy simpática con todos todo el tiempo. Eres una de las chicas más populares del instituto. Y es que eres tan amable, ¿verdad? Pues no».
Empieza una escena, Clay se encuentra en el pasillo de su instituto, delante de una mesa en la que está Courtney y sus amigas con unos folletos del baile de invierno.
-No sabía que Clay Jensen bailaba-. Dice bromeando Courtney.
-Clay Jensen ha perdido una apuesta contra Jeff Atkins-.
-Qué dulce que hable de él en tercera persona-. Dice para sí una amiga de Courtney.
-Tu entrada guapo. Es formal-. Dice Courtney con la entrada en su mano.
-De acuerdo-. Contesta Clay.
-Espero que me reserves un baile-. Le dice Courtney con una sonrisilla.
-Sí, claro-.
-¡Eh, casco!-. Aparece Hannah y abraza a Clay por la espalda.
-Hola, ¿vas a ir?-. Le pregunta Clay con curiosidad.
-No creo-.
-Pues deberías-. Interviene Courtney. -Muchos chicos lindos han comprado su entrada hoy, ¿debería ir Clay?-. Añade Courtney.
-Claro, claro que sí-. Clay sonríe a Hannah.
«Esperaba que fuésemos amigas. Necesitaba una. Y creo que tú también. Pero tenías secretos que guardar, y creo, que hasta a ti misma».
Cambiamos de escena, es otro día, y es la hora del recreo. El comedor está abarrotado de estudiantes.
«Durante días, después de la divulgación de Tyler, traté de captar tu atención. me ignoraste durante semanas. Pero decidí que ya bastaba. Tenía que captar tu atención. Estábamos en esto juntas, ¿no?».
Hannah ve a lo lejos a Courtney, está sentada sola. Cree que es una buena ocasión acercarse, y hablar de las fotos. Se levanta, y decidida, se sienta frente a ella.
-Hola-. Dice Hannah.
-Está ocupado-. Contesta rápidamente Courtney.
-Sí, por mí. Háblame-.
-¿De qué?-. Pregunta Courtney algo incómoda.
-Creí que éramos amigas-. Hannah muestra tristeza en sus palabras.
-Somos amigas-. Dice Courtney.
-Sí, ya. Sea lo que sea, no tienes por qué pasarlo sola-.
-No sé de qué hablas-.
-Como tú dijiste, sé que se siente cuando la gente te juzga. Es un asco. Ayuda tener una amiga que no te juzgue-.
-¿No íbamos a comer juntas?-. Pregunta un grupo de chicas mirando a Courtney.
-Bien, me voy-. Dice Hannah al instante.
-No, quédate. Hay sitio para todas-. Expresa Courtney.
-Íbamos a hablar del baile-. Dice una de las chicas (amigas de Courtney).
-Vas a ir, ¿verdad?-. Le pregunta Courtney a Hannah. Hannah asiente. Courtney le sonríe.
-¿Sabes conducir?-. Le pregunta una amiga de Courtney. Hannah vuelve a asentir.
Hannah sonríe, cree que Courtney se ha olvidado por un momento de todo lo ocurrido. Vuelve a ser feliz. Consigue rápidamente un automóvil nuevo gracias a su padre,y siente una gran emoción por dentro: va a tener una amiga nuevamente.
Hannah lleva a Courtney y a sus amigas al baile del colegio. El gimnasio está perfectamente decorado con motivos invernales.
-¡Qué barbaridad!-. Exclama Hannah.
-Tardaron días en hacerlo, y se los hice repetir dos veces-. Le contesta una amiga de Courtney.
-¡Qué guapas señoritas!, ¿una foto?-. Dice Tyler en el momento en el que se hace un hueco entre la gente.
Hannah y Courtney son incapaces de mirarle. Hannah avanza un poco por el lugar, y se encuentra con Jess, su vieja amiga.
-¡Hannah!-. Exclama Jess.
-Hola-.
-¿Con quién has venido?-. Pregunta extrañada Jess.
-Con Courtney y sus… falderas-. Hannah se ríe. -¿Y tú? ¿Una cita?-.
-Se suponía-. Dice Jess algo seria.
-Hola-. Aparece Alex.
-Hola, sí… yo me…-.
-Estás increíble-. Le dice Alex a Jessica.
-¿Cómo para salir en tu próxima lista?-. Le pregunta Jess con ironía. Hannah se va.
Mientras tanto, Clay está sentado, observando como la gente baila. A lo lejos,ve a Hannah. Le sonríe. A su derecha, aparece Jeff.
-Venga, ve por ella-. Le señala a Hannah.
-¿Para qué?-. Pregunta Clay.
-Es un baile, baila con ella-.
-No sé bailar, te lo dije cuando me obligaste a venir-.
-Nadie sabe bailar. No te obligué a venir. Apostamos y saqué más de un aprobado, perdiste. Ahora ve con ella, venga-. Jeff insiste. Clay asiente con cansancio.
Clay le vuelve a sonreír a Hannah, y se dirige hacia ella. Está muy nervioso. Hannah está muy guapa, lleva un vestido de color morado. Clay lleva un traje oscuro.
-Estás adorable-. Le dice Hannah cunado se encuentran en la pista de baile.
-¿Otra vez esa palabra?-. Pregunta Clay.
-No sabía que estabas aquí-.
-Sí, me suele pasar. Suelo pasar desapercibido-.
-Ojalá tuviera esa habilidad-. Le dice Hannah. Da un suspiro.
-No sé muy bien cómo se hace, y quizás estoy siendo demasiado formal. Aunque es el baile de invierno, no sé si la gente dice, no sé… ¿quieres bailar?-. Clay mira a Hannah un poco avergonzado.
-Sí, me encanta bailar. Pero no sé si sea una canción para bailar juntos-.
-Ya, podríamos dar saltos juntos-. Propone Clay con una sonrisa.
-¿Así?-. Hannah salta.
-Sí, o así-. Los dos saltan riendo.
-Bien instituto Liberty, vamos a bajar el ritmo-. Anuncia uno de los djs. El otro dj es Tony.
-Tony tiene un gusto increíble. Esta canción es perfecta-. Comenta Hannah.
-Ya, supongo que deberíamos… bailar-. Clay coge poco a poco de la cintura a Hannah, y los dos se empiezan a mover al compás de la música. -Esta canción me recuerda a películas antiguas, en serio-. Comenta Clay. Hannah ríe.
-Me has mentido-.
-¿¡Por qué!?-. Se soprende Clay.
-Tienes ritmo, bailas como un profesional-.
-He ido a Ballet desde los 6-.
-No fastidies, ¿de veras?-. Pregunta Hannah atónita.
-No-. Responde Clay riéndose.
-Me lo he creído. Eres una caja de sorpresas-.
-Sí, y espera. ¿Quédate conmigo, de acuerdo?-.
-Sí-. Los dos se juntan poco a poco, pero algo distrae a Hannah. A lo lejos ve a Jess borracha con Justin. -Lo siento, pero debería ir-. Señala a Jess.
-Sí, claro-. Responde Clay algo triste.
Hannah va yendo hasta donde está Jess, hasta que un compañero suya la detiene.
-¿Dónde está tu novia?-.
-¿A qué novia te refieres?-. Hannah duda si sabe lo que ocurrió con Courtney.
-Tu novia de la foto, Laura. Dicen que les gusta, ya sabes, montárselos con chicos-.
-¿¡Quién dice eso!?-. Hannah empieza a perder la paciencia.
-Courtney. Dice que le pediste que se acueste con ustedes. No me extraña, ella está muy bien-.
-Debes estar de broma-. Hannah le mira serio.
-¿Mi información no es buena?-.
-No lo es-. Responde tajante Hannah.
-Creo que sí, además me dijo que te acostaste con Justin-. Clay ha oído toda la conversación. Hannah se va sin decir palabra alguna.
Por un momento, Hannah decide salir del gimnasio para ir al baño, y por casualidad se encuentra a Courtney sentada en el suelo.
-¿¡De qué narices vas!?-. Le pregunta indignada Hannah.
-Hannah, yo…-.
-¿Quieres que pague yo todo esto? Claro, como piensan que soy una puta, ¿por qué no un poco más?-.
-Lo siento, empezaron a hablar de la foto… y tenía que hacer algo-. Courtney tiene la mirada clavada en el suelo.
-No hacía falta-. Hannah le suelta una mirada asesina.
-Lo siento….-.
-Quiero ser tu amiga. Y eso de que la gente sepa de nosotras, me da igual. Perdona si tienes miedo, pero yo no soy tu escudo, ¿de acuerdo? No me jodas la vida, solo porque no te gusta quién eres-. Se hace un silencio, Hannah va a buscar a Jess, y Courtney se queda llorando en silencio.
Le cuesta poco encontrar a su vieja amiga, está montando un alboroto considerable en medio de la pista de baile. Está borracha sin lugar a dudas. Y Justin, no es precisamente fiable.
-La diversión se acabó-. Hannah coge de la mano a Jess, y le hace un gesto para que le siga. Justin se queda sin palabras.
-¡No, me estoy divirtiendo!-. Protesta Jess, pero Hannah le vuelve a agarrar de la mano, y se la lleva del baile.
-Esa Hannah Baker, es una lesbiana loca-. Dice el chico con el que estuvo Hannah hace unos minutos.
-¡Vete a la mierda Montgomery!-. Justin le calla en el acto.
En la otra parte del gimnasio, se encuentran Clay y Jeff. Clay no está muy alegre.
-¿Qué ha pasado?- Pregunta Jeff con curiosidad.
-Se ha ido-.
-¿Por qué?-.
-Porque ella cree que me importan cosas, que de verdad no me importan en absoluto-. Responde Clay.
Cambiamos de escena, nos encontramos en el coche de Hannah. Está con Jess.
-¡Me lo estaba pasando muy bien!-. Le vuelve a decir Jess.
-Te he salvado, estabas rodeada de tiburones. Para eso están las amigas-. Hannah comprueba que aún no está del todo bien.
-Me gusta Justin, es simpático-. Le suelta Jess.
-No deberías, no lo es. Hay agua y galletas en el reposabrazos, deberías comer-.
-Serías la mejor mamá-. Jess sonríe a Hannah.
-Gracias Jess-.
-Perdona la bofetada que te dí-. Hannah se queda sin palabras, no imaginaba que se iba disculpar de algo que pasó hace bastante tiempo.
«Las amigas se cuidan Courtney». Quinta razón.
Aexei 